Cada boda es única pero a la vez todas tienen esos elementos casi universales que no pueden faltar en el festejo de un día tan importante. Uno de ellos es el baile. Hay novios que practican duro para dar lo mejor de si sobre la pista el día de la fiesta, sobre todo si son pasos que muchos tienen medio oxidados como los del vals.
El novio de esta historia se nota que trabajó muy duro en perfeccionar su técnica junto a su madre.
Cuando llegó el gran día, madre e hijo se lanzaron a la pista y enternecieron al público moviéndose juntos al ritmo de “What a wonderful World”, de Louis Armstrong.
¡Pero eso no se quedaba ahí! De repente el ritmo cambia y empiezan a hacer algo que dejó a todos con la boca abierta. Tienes que verlos en el video de abajo.