El cambio climático generado por el hombre está alterando nuestro entorno a pasos agigantados sin que le pongamos freno. Estas alteraciones también están afectado el comportamiento de muchos otros organismos vivientes, que debido al aumento de las temperaturas se comportan de forma distinta a lo usual.
Uno de estos organismos es la peligrosa carabela portuguesa, un organismo que no debe confundirse con una medusa (aunque se le parece) dado que es realmente peligroso y puede causar graves heridas e incluso la muerte en un ser humano.
Una mujer en Alicante, en España, fue recientemente víctima de la terrible picadura de una de estas criaturas, que recién en los últimos años empiezan a ser detectadas en aguas del Mediterráneo, según reporta Diario Información.
Según informó Diario Información, una mujer de mediana edad fue ingresada recientemente en el Hospital de Sant Joan de Alicante, tras recibir en su rostro una picadura de carabela portuguesa.
La mujer al parecer se bañaba en una playa de Cabo de Huertas, en Alicante cuando de repente sintió un fuerte latigazo en la cara, tras lo cual salió del agua corriendo y fue trasladada al hospital con una fuerte hinchazón en el rostro e irritación en la piel.
Este tipo de criaturas suelen vivir en aguas tropicales y subtropicales, pero debido al calentamiento global cada vez es más común detectarlas fuera de su hábitat.
Los científicos creen que las carabelas fueron arrastradas por la corriente desde Cádiz y Huelva, donde suelen tener sus zonas de cría.
La carabela portuguesa parece una medusa pero no lo es, es un hidrozoo que suele habitar en las aguas más cálidas del planeta, normalmente en los océanos Pacífico e Índico, o en la corriente del golfo atlántico.
Su picadura es extremadamente dolorosa e incluso puede ser mortal. Dispone de unos tentáculos gelatinosos que extendidos pueden llegar a medir hasta 50 metros, aunque normalmente no pasan de 10. Estos disponen de una toxina que pueden paralizar a su presa e incluso matarla.