Ava Byrne es una niña de tres años de Pennsylvania, en Estados Unidos, que desapareció de su hogar recientemente, lo que obligó a las autoridades a emitir lo que se conoce como “alerta ámbar” en diversos puntos del país.
Lo que no esperaban es que tan sólo minutos después del anuncio, el gran poder de observación de unos buenos samaritanos llevara al existoso rescate de la pequeña.
Un ciudadano reconoció la matrícula del auto plateado anunciado en la alerta ámbar y avisó al policía de tráfico Md Ali.
Tras revisar el número de matrícula, éste detuvo al auto y le dijo al hombre en su interior que no se moviera porque quería conversar con él. El individuo trató de escapar, pero fue interceptado por otro policía.
El secuestrador era Robert Byrne, el padre de la niña, quien sufre una enfermedad mental que hace que escuche «voces». Éste fue detenido y la niña llevada al hospital, donde se comprobó que no había sufrido ningún daño.
Los policías hicieron todo para entretener a la niña hasta que su mamá, Morgan Barela, llegó a buscarla. Pocos podemos imaginar la angustia que habrá pasado y la alegría de poder recuperar a su hija tan rápido…¡Todo gracias al gran poder de observación y la buena voluntad de un ciudadano anónimo y un policía tráfico!
Por favor, comparte el feliz rescate de Ava con los demás.