Enfrentar un cáncer es tremendamente duro. Lo más difícil es aguantar las largas semanas o interminables meses en el hospital entre tratamientos que a menudo causan mucho dolor.
Los centros hospitalarios son lugares que transmiten sufrimiento y tristeza, algo que no hace nada bien a los niños (ni a los adultos) que tratan de recuperarse de su enfermedad. Por eso me pareció tan alentador este proyecto llevado a cabo en un hospital de Valencia, en España done los trabajadores del centro trajeron a sus perros para que los niños los "adoptaran" temporalmente.
Desde hace un año, 9 niños y niñas enfermos de cáncer, hospitalizados en el Hospital La Fe de Valencia, forman parte de una iniciativa muy especial. Reciben la visita de unos enfermeros de cuatro patas muy especiales, ¡perros!
Esto forma parte del proyecto “Can de la mano», que consiste en llevar perros entrenados al hospital para que los niños enfermos de cáncer allí internados jueguen con ellos. Los resultados están siendo enormemente positivos, porque estos animales logran arrancar a estos pequeños la sonrisa perdida entre las paredes del hospital.
La llegada de las mascotas alegran la rutina de estos jóvenes pacientes y les permite dejar de pensar por un momento en su enfermedad. Las visitas se realizan siempre bajo supervisión médica.
Esperamos que este proyecto se replique en muchos otros hospitales. Nada como un mejor que un buen y cariñoso amigo para alejarse de las preocupaciones.
¡Si te gustó la idea, por favor, compárte la idea a ver si inspira a otros hospitales del mundo!
