Julia Wendell, una joven polaca de 23 años, saltó a los titulares de todo el mundo en 2023 tras afirmar que era Madeleine McCann, la niña británica que desapareció misteriosamente de un centro turístico portugués en 2007.
Sus estremecedoras afirmaciones suscitaron una enorme controversia, y muchos las tacharon de falsas. Pero ahora, el caso ha dado otro giro dramático.
A través de la red social @IamMadeleineMcCann, Julia suplicó ayuda y pidió hablar con los padres de Maddie, Kate y Gerry McCann.
Señaló supuestas similitudes físicas como prueba e incluso apareció en el programa Dr. Phil para compartir su historia. Sin embargo, después de enfrentarse a intensas reacciones, incluidas amenazas de muerte, se retractó y pidió disculpas a los McCann.
Julia explicó que durante la terapia se dio cuenta de que los recuerdos de su infancia eran fragmentarios, lo que la llevó a preguntarse si había sido adoptada. Sin embargo, cuando preguntó a sus familiares, estos negaron que sus afirmaciones, tras lo cual Julia empezó a buscar en sitios web de personas desaparecidas.
«Nunca quise hacer daño a nadie, ni siquiera a los McCann», explicó Julia. «Realmente quería saber quién soy». Añadió que las cosas habrían sido diferentes si hubiera tenido la oportunidad de volver a hacerlo. «Yo nunca entraría en las redes sociales. Te puede destruir».
Los resultados de las pruebas de ADN agitan las cosas
Pero ahora, el caso que rodea a Julia Wendell, también conocida como Julia Faustyna o Julia Wandelt, ha dado un nuevo giro.
Según Daily Mail, la joven de 23 años afirma que se ha sometido a una prueba de ADN y que los resultados han sido examinados por un «experto de renombre mundial» que los ha comparado con el ADN de la escena del crimen de la desaparición de Madeleine McCann en Portugal en 2007.
Este experto anónimo habría llegado a la conclusión de que los resultados «sugieren claramente» que Gerry McCann podría ser su padre. También ha utilizado su nueva cuenta en las redes sociales para compartir los «resultados» de esta última prueba de ADN, en la que afirma que Kate y Gerry McCann se negaron a participar.
Para aumentar la polémica, el experto anónimo supuestamente llegó a la conclusión de que el ADN de Julia coincide perfectamente con las muestras tomadas en el apartamento de vacaciones donde Madeleine McCann desapareció en 2007.
Además de los resultados de ADN, también alega que los expertos examinaron sus ojos, dientes y voz, comparándolos con los de Madeleine, la niña de 3 años que desapareció de su cama en Praia da Luz la noche del 3 de mayo, hace casi 18 años.
El Dr. Monte Miller, experto forense de la Universidad de Loma Linda (California), analizó los resultados. «La respuesta sencilla es que el sospechoso no es la fuente definitiva del ADN de las pruebas», dijo el Dr. Miller a Metro.
«Sin embargo, la coincidencia es más fuerte de lo que esperaría de la pura coincidencia, y hay un patrón específico que sugiere una conexión familiar casi segura».
Las familias McCann y Wendell rechazan las pruebas de ADN
A pesar de los impactantes resultados, ni los padres polacos de Julia ni los McCann están dispuestos a someterse a una prueba de ADN para zanjar el asunto de una vez por todas.
Este último anuncio contradice las declaraciones anteriores de la investigadora privada Dra. Fia Johansson, que en 2023 reveló los resultados de ADN de la Sra. Wandelt, que confirmaban que, de hecho, era totalmente polaca. Los padres de Julia insisten en que es su hija biológica y no tiene ninguna relación con la joven británica desaparecida.
La desaparición de Madeleine McCann sigue siendo uno de los casos sin resolver más tristemente célebres del mundo. Los padres de Madeleine, Kate y Gerry McCann, siempre han mantenido que fue secuestrada después de que la dejaran sola con sus hermanos en su apartamento de vacaciones de Praia da Luz (Portugal) para ir a comer a un restaurante cercano.
¿Por qué crees que los McCann no quieren someterse a las pruebas de ADN para aclarar si esta joven polaca es su hija? ¡Comparte la noticia y comenta!
