Perder peso puede suponer un mejora de la autoestima y la confianza. Al comienzo del verano puede que queramos ponernos en forma o tal vez nuestros hábitos alimenticios se hayan vuelto malos después de la temporada festiva y deseemos cambiarlos.
Pero para Matthew Houser, de Bristol, Virginia, perder peso era una cuestión de vida o muerte una vez que el médico le dijo que solo le quedaban seis meses de vida.
Ahora quiere utilizar su experiencia y su increíble transformación para inspirar a otros.
Empezó a planear su funeral
En 2016, Matthew fue hospitalizado debido a su peso, que llegaba a más de 362 kilos.
«Estaba básicamente en mi lecho de muerte. Y supuse, bueno esto es todo. Debería planear mi funeral, dijo el chico según el periódico británico The Mirror.
Cuando todo cambió
Se había resignado a su sentencia de muerte. Desde la infancia, Houser había luchado con su peso, experimentando depresión y ansiedad…
En la escuela, me acosaron bastante y no tenía muchos amigos», dijo Houser. «Mis amigos eran básicamente la comida y la televisión».
Pero algo cambió entonces en su mente.
«De repente, un día, estaba en el hospital y simplemente hice clic. Necesitas hacer algo, necesitas cambiar tu vida», dijo según The Mirror.
Tres años después, Houser está irreconocible para amigos y familiares. Ahora, el chico de 25 años es completamente diferente después de perder casi 272 kilos.
Matthew ha logrado su notable transformación llevando un control diario de sus alimentos y haciendo ejercicio al menos dos horas, durante seis días a la semana.
Ahora desea que su increíble historia sirva de inspiración a otros.
«Va a ser difícil, pero puedes lograrlo», agregó.
¡Qué cambio tan increíble! Es realmente sorprendente lo que puedes lograr cuando te lo propones.
Por favor comparte esta historia para inspirar a otros.