A menudo nos olvidamos de que hay personas en este mundo que se juegan la vida por nuestra seguridad, como los policías.
Por mucho que nos enoje cuando nos ponen una multa, la verdad es que si no existieran agentes de seguridad las ciudades serían una anarquía.
Aun así, hay países que viven el fuerte azote de la violencia y los agentes de policía se ven también afectados, a menudo trágicamente como sucedió con una joven agente de 25 años recientemente en Argentina.
La agente Lourdes Espíndola, de 25 años, se encontraba recientemente esperando el autobús en Ituizangó, en la provincia argentina de Buenos Aires, cuando unos ladrones trataron de robarle su arma de reglamento, seguramente para cometer crímenes.
Según reportó el medio argentino Todo Noticias (TN), los ladrones iban en moto y Lourdes forcejeó con ellos para evitar que se la robaran, entonces uno de ellos le disparó en el cuello.
La joven llegó a tener fuerzas para escribir a su marido un mensaje por whasapp que decía «Me dispararon, me estoy muriendo».
Poco después fue atendida por los servicios de emergencia, pero tras permanecer en estado crítico en el hospital los médicos le diagnosticaron muerte cerebral.
Según fuentes cercanas a la familia, sus padres ya han firmado los papeles para donar sus órganos.
Su marido, Fernando Altamirano, quien también es policía lloró desconsolado ante las cámaras, afirmando que la pareja esperaba poder dejar su trabajo en las fuerzas de seguridad porque temían por su vida, debido al elevado índice de violencia en la zona.
Le dije: ‘No vamos a esperar que nos peguen un tiro’, y ahora nos pasa esto», se lamentó Fernando Altamirano.
«Amamos lo que hacemos, pero no se puede vivir más en este país. Ya no quiero ser policía, tengo dos hijos que son el amor de mi vida y no voy a permitir que se queden sin papá», afirmó el hombre, que contó que hace tres años que Lourdes trabajaba en la fuerza policial.
Es descorazonador ver cómo una vida tan joven ha dejado este mundo de una forma tan terrible. Nuestros pensamientos están con su familia en estos difíciles momentos.
Los policías merecen nuestro reconocimiento por el labor que hacen, ojalá atrapen a los responsables de este terrible crimen. Comparte esta noticia si estás de acuerdo.