Logan es un hermoso bebé que acaba de vivir un infierno junto a su madre Vivienne Wardrop. Salieron a comprar juntos a una tienda y esta mamá sentó a su hijo de 10 meses en la sillita del carro.
Al día siguiente, Logan despertó con casi 40º de fiebre y tuvo que ser internado en cuidados intensivos durante 8 días.
Logan fue diagnosticado con adenovirus, rotavirus, salmonelosis y meningitis. Tras hablar con los médicos, concluyeron que el único lugar donde el bebé se podría haber contagiado de todo esto es en el carrito del super donde le sentó.
Vivienne quiere ahora advertir a otras madres que tengan mucho cuidado antes de sentar a sus niños en ese carrito. Hay que tener en cuenta de que los bebés son especialmente vulnerables al ataque de bacterias y virus.
Antes de sentarles, mejor limpiar el asiento con productos antibacterianos para evitar ser infectado.
Por suerte, Logan se pondrá bien después del susto, pero otros niños quizás no tendrían tanta suerte.
¡Por favor, comparte esto para alertar a todo el mundo de esto!