La cosa no pintaba bien para un perro de 13 años llamado Sam. Este mix de labrador se cayó en las aguas heladas del Middle River en Madison Cunty, Iowa.
Era incapaz de salir del agua y las cosas parecían que no iban a terminar bien para este perro. Pero entonces su fortuna cambió, un hombre estaba paseando a su perro ahí cerca y escuchó los ladridos procedentes del río.
Cuando se dio cuenta de que los ladridos procedían de un perro en peligro, actuó rápidamente.
Jerry Romine estaba paseando a su perra, Lucy, cuando escuchó a otro perro ladrar. Subió a Lucy al coche y condujo hasta el puente donde se escuchaban los ladridos.
Desde el puente Jerry pudo ver a Sam.
Sólo se podía ver la cabeza del labrador fuera del agua. Estaba luchando por su vida.
Jerry Romine dijo a The Des Moines Register que los gemidos de Sam hicieron que «se me helara la sangre».
Jerry trató de acercarse al perro para sacarlo, pero no podía acercarse lo suficiente. Cada vez que estaba cerca, Sam emitía un aullido desgarrador.
«Es el peor sonido que puedes escuchar de un animal. Cada vez que me iba y no podía verme empezaba a entrar en pánico y a aullar».
Jerry quería tratar de llevar a Sam a un lugar seguro con una cuerda, pero de nuevo no podía acercarse sin meterse en el agua. Finalmente, llamó a los servicios de emergencias.
Quince minutos después los rescatadores llegaron. Jerry dijo a los bomberos dónde encontrar a Sam y ráìdamente lograron sacar a Sam del río helado.
Aunque Sam estaba tan congelado que no podía ni temblar, gracias a un veterinario pudo erguirse sobre sus cuatro patas en solo 30 minutos.
Mira el magnífico video con el rescate de Sam aquí abajo:
Todos deberíamos seguir el ejemplo de Jerry y escuchar a nuestro instinto si escuchamos el sonido de un perro en pánico. ¡Compártelo si estás de acuerdo!