Esto es como un cuento. Todas las mañanas esta mujer abre la puerta y grita hacia el bosque. Después de un minuto llega su amigo, que es un poco diferente, corriendo. Luego desayunan juntos y a veces también se ven para el almuerzo y la cena. Mira el vídeo de aquí abajo. Hay que verlos cos sus propios ojos para creer que es verdad.
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