Muchos que tienen, o han tenido, un automóvil saben lo fácil que puede ser chocar con algo de forma accidental. Muchas veces el resultado puede ser una abolladura en el parachoques que acaba con una costosa visita al taller mecánico para repararlo. Cuando esto me pasó a mí me puse a buscar por internet para ver si había alguna forma de resolverlo yo mismo en casa, encontré un truco estupendo que me puede ayudar a evitar un gran gasto. Todavía no lo he probado en mi automóvil pero lo voy a hacer en cuando tenga un poco de tiempo. El truco es hervir agua y echarla sobre la abolladura, luego presionas cuidadosamente desde la parte interior para aplanar la superficie, después le echas agua fría para “congelar” al parachoques y para que se quede con esa forma. Tengo entendido que funciona mejor si el parachoques es de plástico, pero aparentemente también se puede hacer cuando es de otro material con la ayuda de un chupón, que no cuesta mucho dinero. ¡En el siguiente vídeo puedes ver cómo hacerlo!
A lo mejor ya conocías este truco, pero me pareció interesante compartirlo porque quizá no todo el mundo lo sabe, sobre todo las generaciones más jóvenes. ¡Compártelo para que todos puedan evitar gastos innecesarios!
