Una historia sorprendente tuvo lugar recientemente en California, Estados Unidos, cuando una mujer se encontró a un pequeño animal encogido detrás de un jarrón cerca de la puerta de su casa.
Sharon Bertozzi creyó que era un perro moribundo, que apenas podía moverse en un estado lamentable.
Inmediatamente llamó al City of Folsom Animal Services para que ayudaran al pobre animalito. pero su asombro fue mayúsculo cuando llegaron y le revelaron que en realidad no se trataba de un perro.
No era un perro sino una coyote con una sarna muy avanzada.
El animal fue llevado entonces al refugio para animales salvajes Gold country Wildlife Rescue (GCWR). Bautizada como “Princesa”, allí recibió tratamiento por su sarna y por una fuerte deshidratación.
La coyote permancerá allí durante meses hasta que esté totalmente restablecida y pueda volver a vivir en libertad.
Deseamos que Princesa se recupere muy pronto y pueda volver a su medio natural.
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