Pensarás que los perros y los gatos son peores enemigos, pero esta historia es una prueba de todo lo contrario.
Cuando una noche la casa de una familia australiana se incendió fue casi un desastre total. Leo, el perro de la familia, antepuso su vida a la de sus amigos felinos y les salvó de una muerte segura.
Una noche se desató un incendio en una casa en Melbourne, en Australia. Una madre, sus tres hijos, y su perro, Leo, así como cuatro pequeños mininos recién nacidos estaban en su interior.
La madre logró sacar a todos sus hijos y alertar a los bomberos. Pero no fue capaz de evacuar a los miembros de cuatro patas de la familia antes de que la casa terminara envuelta en llamas.
Entonces pasó algo increíble. Leo, el perro de la familia, demostró un gran amor y coraje. Aunque la casa estaba llena de humo y fuego, rechazó dejar atrás a cuatro mininos. Gracias a su valiente esfuerzo los bomberos fueron capaces de encontrarles rápidamente.
Leo estaba inconsciente cuando los bomberos llegaron, pero fueron capaces de resucitarle con la ayuda de una máscara de oxígeno y un masaje cardíaco.
Milagrosamente, los cuatro gatitos resultaron ilesos, gracias a Leo.
«Leo no abandonó a los mininos y casi le cuesta la vida», dijo a The Telegraph Ken Brown de la Brigada Metropilitana de Bomberos.
La lealtad de los perros nunca deja de sorprenderme. ¡Comparte esto si crees que Leo es un héroe!
