Joven madre sin músculos da a luz a su bebé contra todo pronóstico

Todos los que tienen hijos saben que es muy enriquecedor pero no precisamente un camino de rosas.

Tras un largo día de trabajo, uno necesita mucho amor, comprensión y sobre todo descanso, ¡y una buena noche de sueño!

Pero para muchos padres esto es un reto, seguro que los tienen, o han tenido, hijos lo saben bien.

Para la australiana Sheree Psaila, de 22 años, era especialmente difícil cuidar de su hijo, porque le suponía una gran esfuerzo levantarlo en sus brazos o consolarlo.

”A veces viene a mí llorando y yo no puedo hacer nada», cuenta esta joven madre a Daily Mail , y continúa:

”Yo tengo que esperara que alguien lo pueda tomar en sus brazos y dármelo».

¿La razón? Sheree tiene una enfermedad genética que hace que le falte tejido muscular en los brazos y piernas.

Fue un milagro que pudiese dar a luz a su hijo.

Abajo te contamos su fantástico e inspirador viaje:

 

Sheree Psaila lleva toda su vida desafiando los retos que hay a su alrededor.

Nació con una enfermedad extremadamente inusual, artrogriposis múltiple congénita, que afecta a varias articulaciones del organismo y que hace que los músculos no se desarrollen con normalidad.

Sheree siempre ha tenido que luchar contra viento y marea, ningún médico creía en ella. Le dijeron a sus padres que no viviría más de un año.

Después de 20 operaciones los médicos le dijeron a Sheree que tendría que ir en silla de ruedas y asistir a una escuela especial.

Pero Sheree no estaba dispuesta a dejar que nadie decidiese por ella su destino. Dio sus primeros pasos cuando tenía cinco años y pronto tomó la decisión de no permitir a los compañeros acosadores, y las bajas expectativas, que impidiesen vivir su vida al máximo.

Cuando estudiaba en la universidad conoció a Chris. Él también tenía una enfermedad hereditaria que afectaba a la parte baja de su espina dorsal.

Facebook/ShereePsaila

La pareja se casó en marzo de 2015 y estaban ansiosos por formar su propia familia.

Lamentablemente Sheree sufrió un aborto espontáneo, pero cuando se sintieron recuperados, Sheree y Chris volvieron a intentar ser padres.

”Los médicos dijeron que yo probablemente no podría tener hijos, aunque nunca me daban razones reales y concretas de por qué no era posible», cuenta Sheree a Daily Mail.

Como Sheree medía 120 centímetros, los médicos creían que sería un milagro que un bebé pudiese crecer en su vientre.

Pero se iban a llevar una gran sorpresa pronto.

Facebook/ShereePsaila

Después de mudarse a Melbourne con Chris, Sheree dio a luz un hijo, por cesárea.

El bebé, al que llamaron Hayden, pesó algo menos de 3 kilos al nacer y con buena salud.

El niño no tenía ninguna disfunción ni enfermedad hereditaria, algo que había preocupado lógicamente a Chris y Sheree.

Que su hijo es un milagro es algo en lo que todos están de acuerdo. Su viaje es además una prueba del poder de la fuerza y la voluntad de las personas.

Para ellos ser padre conlleva más resto que para la mayoría de los padres, pero juntos, Sheree y Chris, han demostrado que el amor lo puede todo.

Facebook/ShereePsaila

Debido a sus problemas musculares, Sheree tiene grandes dificultades para levantar en brazos a su hijo.

Por suerte, tienen una asistente que viene a ayudarles cinco días en semana. Pero es Chris el que tiene la mayor carga.

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”Cuando se bañan en la piscina no puedo evitar sentir que a mí me gustaría poder hacer todas las cosas que Chris hace con el niño», cuenta Sheree.

Pero a pesar de su dura lucha, Sheree esta muy contenta de ser la madre un niño fantástico y sano.

Sheree sigue ahora estudiando para lograr su sueño, a pesar de que su discapacidad le recuerde constantemente sus dificultades. Pero está claro que a esta luchadora no se le resiste nada.

Facebook/ShereePsaila

Leer esta historia es para mí una prueba más de que las madres son las personas más fuertes de la Tierra. ¡Compártelo si estás de acuerdo!