Aunque el hecho de tener hijos es un derecho que todas las personas tienen hay algunas personas que no deberían poder ser padres.
Este viernes la central de urgencias en Utah, Estados Unidos, recibió una llamada Clint Nokes, de 19 años. Su hijo, Hudson, de repente había dejado de respirar y necesitaba ayuda urgentemente.
El personal de la ambulancia no pudo revivir al bebé de siete semanas e inmediatamente lo llevaron al hospital.
El padre del bebé le contó a un policía que había tratado de hacer eructar a su hijo después de la comida, pero no podía eructar. Y de repente el bebé se puso muy mal.
Entonces el chico supuestamente también llamó a su novia, la madre del bebé, Krista Larsen, para contarle que algo iba muy mal.
Pero cuando la policía luego hablo con el personal del hospital ya no creían tanto en la historia de Clint.
La verdad se iba a revelar en la autopsia.
La cabeza y el pecho del bebé estaban llenos de morados y también se veían signos de hemorragias en el cerebro.
Los médicos lucharon mucho para salvarle la vida al pequeño bebé, pero no lo lograron.
Hudson murió en el hospital Primary Childens por la mañana el 2 de diciembre, reporta el canal Fox 13.
Fue en la autopsia que vieron la gravedad de las lesiones del niño.
Tenía una fractura en el cráneo, hemorragias en los ojos, sangre en la médula ósea y varias fracturas en el resto del cuerpo.
Cuando le presentaron la evidencia a Clint el finalmente admitió.
Él había «explotado» cuando Hudson no quería parar de llorar. Por eso había tirado al niño al sofá, lo cargó de una pierna y lo sacudió cuando estaba al revés. Una violencia terrible para un bebé tan pequeño.
Antes la misma semana también dejó al niño caer sobre su cabeza en el fregadero del baño.
Nokes fue puesto bajo custodia y está esperando su juicio.
¿Yo no entiendo uno como puede hacer así con un niño inocente? Si sospechas que un niño está siendo maltratado debes contactar la policía.
¡Comparte si también opinas que el padre se merece una sentencia de cárcel larga!
