Austin Simms de Roanoke, en Estados Unidos, es un trabajador de CUPS Coffe & Tea que estaba muy cansado de que muchos clientes le trataran como si fuera una máquina expendedora de café.
Por este motivo, un día decidió colocar en la entrada del local un cartel que obligó a muchos a considerar y rectificar su conducta.
Austin puso un cartel en la entrada del local que decía lo siguiente:
“Café solo”.
$5.00
“Un café solo, por favor”.
$3.00
“Hola, querría un café solo por favor”.
$1,75
Con este escrito indicaba lo que tendría que pagar cada cliente según la forma en que pidiera su consumición. Asegura que con esto espera que las personas no olviden que quien nos sirve en cafés y restaurantes es un ser humano y merece ser tratado con consideración.
“Hice esto porque necesitaba resolver todas las injusticias del mundo empezando por cobrar más a la gente que no se tomaba el tiempo en conectar y darse cuenta de que somos personas las que están detrás del contador”, dijo Simms.
Al día siguiente de colocar este cartel, éste apareció en la prensa británica y se hizo viral en internet.
Desde luego, hará reflexionar a más de uno sobre la necesidad de revisar nuestras actitudes frente a los extraños, principalmente aquellos que ponen todo su esfuerzo cada día en gran cantidad de tiendas y servicios.
Y es que no hay que perder nunca los buenos modales y debemos tratar a todos con respeto, sin importar que sean desconocidos. ¡Por favor, comparte esto si estás de acuerdo!
